Los cinco argentinos que murieron el domingo por la tarde en una carretera del estado mexicano de Quintana Roo, producto de un incidente vial, fueron identificados este lunes por las autoridades locales. Viajaban en una camioneta hacia Cancún, y chocaron violentamente contra una van estacionada, cuyo conductor también resultó fallecido.

Se trata de cuatro hombres y una mujer, ya identificados por la Fiscalía General de ese estado mexicano. Se trata de Vanesa Paola Silvia Díaz, Ezequiel Hernán Sibella, Gerónimo Amengual, Maximiliano Nicolás Laviano y Nahuel López, cuyas edades no trascendieron este lunes al mediodía. Sí la del chofer de la van contra la que impactaron, que tenía 33 años y se llamaba Freddy Omar Quijano Carrillo, mexicano.

Qué se sabe del accidente

La camioneta en el que viajaban los argentinos, una Suzuki Ertiga, perdió el control y cruzó de carril, en el que luego impactó de frente y violentamente contra una van que estaba estacionada. El conductor, que estaba almorzando en su interior, también resultó muerto. Además de los seis fallecidos, otras dos personas resultaron heridas y se encuentran hospitalizadas. El consulado argentino en Playa del Carmen se encuentra colaborando con la investigación.

El choque fue alrededor de las 13 del domingo, a la altura del kilómetro 260 de la carretera federal 307, que une Cancún con Tulum. Según trascendió, la principal hipótesis de la investigación apunta a que el vehículo en que viajaban los argentinos perdió el control debido a la humedad del asfalto y cruzó de carril. Tal fue la violencia del choque que los bomberos tuvieron que trabajar alrededor de tres horas para poder sacar a las víctimas del auto.

Mientras los bomberos intentaban rescatar sin éxito a los argentinos, un helicóptero sanitario trasladó al chofer de la van hacia un hospital, donde horas más tarde falleció. Trabajaba como chofer para la empresa eTransfer y estaba estacionado en la banquina, almorzando antes de retomar su trabajo.

Las dos personas heridas también son argentinas y viajaban junto con sus compatriotas, aparentemente hacia un partido de fútbol en Cancún. Los investigadores sostienen esto ya que todos estaban vestidos con indumentaria deportiva de color verde. Mientras tanto, las familias de los argentinos comenzaron, desde aquí, colectas para poder repatriar los cuerpos una vez culmine la investigación.