Detectan en Santa Fe los primeros ejemplares en el país de la "chicharrita africana"
En los últimos días el INTA confirmó la novedad.
Especialistas del INTA informaron la detección, Santa Fe y en Entre Ríos, de los primeros ejemplares de Leptodelphax maculigera en Argentina. Esta plaga, comúnmente conocida como chicharrita africana por ser originaria de ese continente, puede alimentarse de diversas gramíneas como maíz, caña de azúcar, pasturas y leguminosas, lo que genera preocupación en el sector agropecuario.
Estos primeros individuos fueron capturados en lotes de trigo en ambas provincias y también se detectaron en la gramínea Setaria sphacelat en la localidad santafesina de Reconquista. "La chicharrita africana es conocida por ser una especie oligófaga, es decir, que se puede alimentar de gramíneas, pasturas y leguminosas", explicó Melina Almada, investigadora de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en esa ciudad del norte provincial. Además, destacó que su capacidad para adaptarse a diferentes hospedantes la convierte en una plaga sobre la que "debemos prestar atención".
El hallazgo ocurre en un contexto crítico para la producción agrícola argentina. La chicharrita del maíz, responsable de la caída de más de 11 millones de toneladas en la última campaña, sigue afectando la confianza de los productores, quienes dudan en retomar la siembra de maíz. Esta nueva amenaza genera incertidumbre en el sector, particularmente por los posibles riesgos que la chicharrita africana pueda representar para los cultivos.
Adriana Saluso, investigadora del Laboratorio de Entomología del INTA Paraná en Entre Ríos, señaló que el organismo está concentrado en "estudiar la distribución, abundancia y comportamiento de la chicharrita africana en Argentina" y en evaluar los riesgos que su presencia puede representar. La identificación de este insecto fue confirmada por la División de Entomología de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata.
La chicharrita africana es pequeña, de entre 4 y 6 milímetros de longitud, con un color amarillento y una mancha negra distintiva en la frente. "Estos rasgos distintivos permiten diferenciarla del resto de las chicharritas", explicó Diego Szwarc, investigador de la Estación Experimental de Reconquista, quien añadió que la plaga puede hallarse en diversos hospedantes.
Si bien en Brasil se ha reportado que la chicharrita africana es capaz de adquirir virus (del rayado fino, del mosaico estriado) y fitoplasmas que afectan al maíz, los especialistas aclararon que no existen antecedentes que confirmen que estos insectos puedan transmitir tales patógenos a las plantas de maíz durante su alimentación. Sin embargo, los investigadores advirtieron que es crucial realizar un monitoreo constante, especialmente en cultivos de trigo y setaria.
INTA ya realizó la denuncia de la detección al SENASA, y recomienda a los productores de las regiones afectadas que extremen las medidas de monitoreo para detectar y alertar sobre la presencia de este insecto en sus cultivos.
Fuente: Campo Litoral.