
Comenzó el juicio por abuso sexual contra un médico de San Jerónimo Norte
La Fiscalía pide 8 años de prisión.
Un médico de San Jerónimo Norte identificado como Miguel Ángel Marchisio, de 54 años, comenzó a ser juzgado este lunes 28 en los tribunales de Santa Fe por el presunto abuso sexual de dos pacientes adolescentes en el Centro de Atención Municipal de la localidad del Departamento Los Colonias. El juicio oral se desarrolla sin público presente por pedido de la Fiscalía y decisión del tribunal, conformado por los jueces Nicolás Falkenberg y José Luis García Troiano, y el conjuez Néstor Pereyra.
Marchisio, acusado como autor del delito de abuso sexual gravemente ultrajante y enfrenta una posible pena a 8 años de prisión e inhabilitación para el ejercicio de la profesión, según adelantó el MPA en la causa que tramitan los fiscales Alejandro Benítez (del departamento Las Colonias) y Celeste Minniti, de la Unidad de Violencia de Género, Familiar y Sexual. En tanto, el médico está representado por el abogado defensor particular Raúl Ochoa y Gómez.
El caso
Marchisio fue denunciado en marzo de 2020, cuando se desempeñaba como médico generalista en el CAM de San Jerónimo Norte, puesto que ocupaba desde el 2001. La denuncia alertaba dos posibles hechos de abuso sexual a dos pacientes de 15 y 16 años: uno habría ocurrido en el mes de diciembre de 2019 y el otro un mes antes, en noviembre.
La investigación fue llevada adelante por el MPA de Las Colonias, con colaboración de la Unidad de Violencia de Género de Santa Fe. La evidencia reunida en la investigación permitió sostener la acusación al profesional, quien llega al juicio en prisión preventiva.
En uno de los casos investigados, la menor debió ser hospitalizada por un aparente cuadro de ebriedad; durante el día, a fines de diciembre de 2019, había estado en una quinta pasando el día con una amiga, su novio y la mamá de éste. Habían estado en la pileta y bebido cerveza. Cuando la chica se desvaneció llamaron a una ambulancia y en el CAM fue recibida por una enfermera y el médico, donde le realizaron las primeras atenciones y debió recibir suero y oxígeno.
La joven estuvo acompañada en el centro de salud por su madre y por su novio, quienes aguardaban en la sala de espera. Cuando el médico terminó de atenderla, ambos ingresaron a ver a la chica y ella les contó lo ocurrido: primero a su novio, al oído, y luego a su mamá. Esto motivó que la mujer increpe al profesional frente a una de las enfermeras. El hombre, por supuesto, negó la ocurrencia del hecho.
Pero eso no fue todo. Al poco tiempo la adolescente volvió a contar lo que le pasó: a la mamá de su novio y al equipo de Niñez de la municipalidad local. En todos los casos, el relato fue invariable. En la audiencia de prisión preventiva los fiscales explicaron que la chica y el grupo familiar ya estaban siendo asistidos por el equipo de Niñez, a raíz de algunos inconvenientes que expusieron las autoridades escolares. La adolescente padecía desvanecimientos y convulsiones cuyo origen no se ha determinado, e incluso algunos adultos de su círculo lo tomaban como "simulacros".
El segundo caso denunciado tiene varios puntos en común con el anterior: la víctima también tiene 16 años y era habitual que deba ser atendida en el CAM. En su caso, la chica presenta “crisis subjetivas” originadas en un hecho anterior, le cuesta establecer vínculos sociales y tenía una mala convivencia con su mamá, por lo que se mudó con una hermana mayor.
Fue a su hermana a quien le pudo hacer una breve referencia de algo que “la incomodó” en la atención recibida por el médico. En un primer momento esta joven, por su estado anímico, no pudo relatar con tanto detalle como la víctima anterior, que sí logró brindar en la entrevista en Cámara Gesell realizada en la tarde del lunes.
En las historias clínicas secuestradas consta que los médicos que las atendían en cada caso era quien se encontraba de guardia en ese momento, por lo que tampoco conocían el nombre del profesional. Las dos chicas, al momento de decir quién fue el agresor, realizaron una descripción física del profesional: un hombre grande, de baja estatura y calvo. Es decir, no surge de la investigación que pueda existir animosidad por parte de las dos jóvenes contra el profesional.
El juicio
Este lunes se realizan los alegatos de apertura y la producción de la prueba. Comenzará con la proyección de las cámaras gesell de las víctimas, dos adolescentes que al momento de los hechos tenían 15 y 16 años, y luego empezará la ronda de testigos.
El juicio continuará el martes con los testimonios propuestos por la Defensa y en caso de no tener que reprogramarse las audiencias, el miércoles serán los alegatos de clausura. En tanto, la sentencia está previsto que se de a conocer el viernes.
Fuente: AIRE.-